«El periodo más trascendente en la vida del ser humano son sus primeros años. En doce meses, el recién nacido pasa de ser totalmente dependiente del adulto a desplazarse erguido por sí solo, de recurrir al llanto como exclusivo sistema de comunicación a utilizar palabras con significado inequívoco en su comunidad, de la percepción vaga de las figuras y sonidos de su entorno a distinguir familiares de extraños, comprender órdenes sencillas y saber que un objeto existe aunque no esté en ese momento en su campo visual o acústico.
Podríamos extendernos a lo largo de páginas y páginas sobre este mágico proceso de transformación. Mucho se ha escrito sobre ello. Libros sesudos, sencillos, eruditos, con sabiduría, dogmáticos, indefinibles… Y es que el asunto da mucho de sí. El libro que el lector tiene ahora en sus manos es un encanto. Miel pura. Aquí, la sabiduría se esconde tras una humilde sencillez. Libro útil. Yo lo he disfrutado. Lo recomiendo.»
Emilio Fernández-Álvarez, ex jefe del Servicio de Neuropediatría del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona y profesor titular de la Universidad de Barcelona