Los cambios que el sistema sanitario ha sufrido en la última década (la disminución de la estancia hospitalaria y el cierre de unidades) han provocado que los estudiantes del Grado de Enfermería pierdan la oportunidad de realizar formación mediante la práctica clínica. Se recopilan aquí instrumentos que muestran propiedades psicométricas adecuadas para evaluar las competencias de los profesionales de la salud mediante la metodología de la simulación, la cual permite formar a los estudiantes exponiéndolos a una situación clínica que reproduce la realidad, sin poner en riesgo al paciente y con un feedback inmediato por parte del profesorado
Las ventajas de utilizar la simulación del paciente humano (HPS) acelera el proceso de aprendizaje del estudiante y contribuye a elevar su calidad gracias a que se puede repetir un escenario tantas veces como necesite el alumno hasta adquirir una habilidad, a la vez que posibilita la práctica de procedimientos complejos. Así, las habilidades aprendidas pueden ser transferibles a la realidad.